Un vino vegano muy complejo, redondo y equilibrado de garnacha tinta centenaria. Vendimiado de forma manual y tras 18 meses de crianza en barrica nueva de roble francés, esta elaboración sólo puede hacerse en añadas excepcionales. Un vino con vocación de guarda, personal, largo, de terruño, con notas de piel de naranja, grafito, monte bajo, frutos silvestres, con predominio de balsámicos y suave madera que le otorga gran elegancia y finura.

Un vino vegano, vendimiado de forma manual y con una crianza de entre 10 y 16 meses, en barrica de roble francés de 500 litros de distintos usos. Aromáticamente con ligera evolución oxidativa propia de la variedad y balsámicos característicos de los vinos de la bodega, junto a los frutillos silvestres, guinda y grafitos. Elegante, redondo y personal junto a la rusticidad de la variedad ligeramente salina y mineral, que le otorga el suelo.

Un vino vegano, vendimiado de forma manual y con una crianza de 10 meses en barrica de roble francés. El uso comedido del roble lo convierte en la más fresca de nuestras garnachas: muy varietal con aromas florales, ciruela, monte bajo y con un fondo muy mineral, característico del suelo granítico. Pureza de la garnacha tinta en nuestro terruño.

Un vino 100% ECO y vegano, vendimiado de forma manual y con una crianza media de 14 meses en barrica de roble francés. Armonioso, sobrio, con aromas balsámicos, de guinda, ciruela roja, monte mediterráneo, frutos silvestres, grafitos y recuerdos minerales del granito. Un vino para disfrutar con cualquier maridaje por su esencia y redondez.

Un vino 100% ECO, vendimiado de forma manual con una crianza de 20 meses en barricas de roble francés de 500 litros.  Sorprende su alta capacidad de envejecimiento, obteniendo un vino muy particular de gran elegancia y personalidad. Sus aromas nos recuerdan al dulce de membrillo, las peras, los amielados, la flor blanca como el azahar o el jazmín, la piel critica de la naranja, los balsámicos y los recuerdos de frutos secos.

Un vino 100% ECO y vegano, vendimiado de forma manual con una crianza de 6 meses en barricas usadas de roble francés. Sus aromas nos traen recuerdos del propio mosto y hollejos de la uva, con dominancia de peras, orejones o piel de pomelo dulce. En boca sorprende su volumen y untuosidad, salinidad mineral con un final ligeramente amargo característico de esta variedad.