El lloro de la vid es un fenómeno que ocurre en los viñedos con la llegada de la primavera y, aunque su nombre pueda sonar misterioso o poético, en realidad se trata de un proceso natural de las plantas. En este artículo, vamos a explorar qué es, por qué sucede y cuándo podemos verlo.
El lloro de la vid se refiere técnicamente a la exudación de agua de la vid, que ocurre especialmente una vez realizada la poda, esto es, normalmente, con el inicio de la primavera. La savia, que es una mezcla de agua y nutrientes que circula por la planta, puede escapar por las heridas que quedan en las vides al cortarles algunas partes, lo que nos indica que la planta comienza a salir de su letargo invernal para dar comienzo a un nuevo ciclo vegetativo.
Este fenómeno recibe el nombre de lloro porque las gotas de agua que caen de las heridas se parecen a lágrimas, como si la planta estuviera llorando. Sin embargo, es un proceso puramente fisiológico de la planta.
¿Por qué sucede el lloro de la vid?
El lloro de la vid es resultado de varios factores fisiológicos y ambientales. Aquí te explicamos las principales causas:
Durante el invierno, la planta entra en reposo vegetativo, pero, cuando la temperatura empieza a subir en primavera, la savia comienza a moverse por la planta, y puede escapar por las heridas, causando el lloro.
El lloro suele ocurrir cuando hay un cambio drástico de temperatura. Tras una temporada fría, un día cálido repentino puede hacer que la planta despierte y empiece a mover los fluidos internos, lo que genera una presión que provoca el lloro.
Por otro lado, la cantidad de agua que la planta tiene disponible también influye. Si el suelo está muy húmedo, la presión dentro de la planta aumenta, lo que también puede causar la salida de savia por las heridas de la poda.
Y, si la poda se realiza en un momento en que la planta aún no ha salido completamente del descanso invernal, es más probable que el lloro ocurra. Además, si las heridas de la poda son más grandes de lo normal o no se realizan con cuidado, la planta puede liberar más savia.
¿Cuándo sucede el lloro de la vid?
El lloro de la vid suele ocurrir a finales del invierno o principios de la primavera, justo antes de que la planta comience a brotar y crecer nuevamente. Es en esta época cuando la savia empieza a movilizarse por la planta, preparándola para la nueva temporada de crecimiento.
Este fenómeno es más común en climas fríos, donde las vides pasan un largo período de descanso invernal. Por su parte, en regiones más cálidas, el lloro puede no ser tan evidente, ya que las vides tienden a estar más activas durante todo el año.
¿Es peligroso para la vid?
Aunque puede parecer algo malo, el lloro de la vid generalmente no es un problema para la planta. La savia que se pierde es principalmente agua, por lo que no afecta mucho la salud de la planta a largo plazo. Sin embargo, si la poda se realiza de forma excesiva o en un momento inadecuado, puede debilitar a la planta. Por eso, es importante saber cuándo y cómo podar.
Así, aunque no es un problema grave, algunos viticultores toman ciertas medidas para reducir el lloro de la vid, como, por ejemplo, elegir muy bien el momento adecuado de la poda para evitar un lloro excesivo. Y es que es importante podar cuando la planta todavía está en su fase de reposo, de esa forma, podrá cicatrizar adecuadamente antes de reactivarse de nuevo.
Por ello, es fundamental hacer cortes limpios y cuidadosos. Los cortes irregulares o dañados pueden aumentar la cantidad de savia que se pierde.
En resumen, el lloro de la vid es un fenómeno natural que ocurre cuando las vides liberan savia por las heridas de la poda, debido a la presión interna de la planta. Este fenómeno indica que la planta está comenzando a activarse para la nueva temporada. Con una correcta gestión de la poda y el manejo adecuado de las condiciones del viñedo, este fenómeno no debería a la salud de las vides.
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